Tristan Harris trabajó 3 años para Google como diseñador de ética para los usuarios. En ese tiempo conoció cómo un puñado de compañías tecnológicas pueden controlar billones de mentes. ¿Cómo lo hacen? Buscando llamar la atención permanente de los visitantes mediante una arquitectura persuasiva en el diseño de visualizaciones de actualizaciones.
Harris ideó un pensamiento sobre la función honesta de la tecnología en la dirección de pensamientos y acciones de millones de personas que utilizan dispositivos móviles (recientemente sugirió estos 5 trucos para combatir la nomofobia y evitar el uso excesivo del celular).
En su perfil tristanharris.com dice haber estudiado durante una década las influencias invisibles que, a su juicio, secuestran el pensamiento y la acción humana, a partir de literatura sobre adicciones, ingeniería social, diseño persuasivo y economía del comportamiento.
Hoy en día lidera una causa para la creación de un marco para la persuasuión ética, en particular, aquella que se refiere a la responsabilidad moral de las empresas de tecnología.
La atención de usuario es el objetivo oculto que dirige la tecnología
La campaña de Harris sobre el control de la atención de usuario fue presentada en TED, una de las plataformas de difusión de presentaciones científicas, culturales y tecnológicas más importantes del mundo. En ella planteó una serie de reflexiones sobre el papel de las redes sociales en el cerebro humano, además destacó que existen diseñadores de «bloques de tiempo» que determinan la conducta de las personas que utilizan dispositivos móviles de comunicación.
«Si ven una notificación, esta los programa para que tengan pensamientos que quizás no tenían la intención de tener. Si presionan esa notificación, esta los programa para que pasen un poco de tiempo, al ser atrapados por algo, por lo que quizá no tenían la intención de dejarse atrapar»: Tristan Harris.
La indignación en Facebook
Las publicaciones emocionales son una fuente de tráfico. De acuerdo al experto, Facebook utiliza la indignación como una forma de capturar la atención de los usuarios, debido a que esta es una reacción natural del cerebro humano ante alguna situación contraria a principios éticos o morales.
Para Harris el efecto de estas emociones no solo se da en el tiempo y espacio físico, sino que las personas desean dar a conocer su indignación con los demás. Por eso es común que se compartan estados de ira, agitación o indignación.
“Si Facebook tuviera la opción entre mostrarles publicaciones indignantes o tranquilas, ellos querrían mostrarles las indignantes, no porque alguien eligió conscientemente eso, sino porque eso funcionó mejor, para capturar su atención”: Tristan Harris.
Los usos también pueden trascender a fines comerciales y publicitarios, pues dado los modelos de negocio que se desarrollan en estas plataformas, casi cualquier grupo económico puede pedirle al equipo de noticias de Facebook que programe ciertos pensamientos en determinados públicos. Harris asegura que con esto “se puede apuntar con precisión una mentira, directamente a las personas que son más susceptibles. Y debido a que esto es rentable, sólo va a empeorar».
Los videos de YouTube, Nétflix
En su presentación, el ex empleado de Google asegura que actualmente existe una carrera entre las compañías para acaparar la atención de los usuarios. Esto explicaría las funciones de reproducción automática en los videos de YouTube, Nétflix y Facebook. La justificación de dichos cambios radica en el interés de los gigantes tecnológicos por acaparan el mercado de contenidos digitales.
«Internet no está evolucionando al azar. La razón por la que parece que nos atrapa en la manera que lo hace, se debe a esta carrera por la atención. Sabemos adónde va esto: la tecnología no es neutral»: Tristan Harris.
Snapchat va más allá
La red más popular entre los adolescentes norteamericanos desarrolló la función Snapstreaks, la cual consiste en llevar un monitoreo a la actividad diaria entre 2 usuarios. Para Tristan Harris, esta interacción no se quiere perder entre los jóvenes, por tanto, son capaces de hasta compartir sus contraseñas para no perder dicho registro. Incluso, “tienen que tomar fotos o simplemente imágenes de paredes o techos sólo para pasar su día”.
“En la década de 1970, cuando estaban simplemente chismeando en el teléfono, no habían cien ingenieros al otro lado de la pantalla, que sabían exactamente cómo funcionaba su psicología y los orquestaban en un doble vínculo entre sí”: Tristan Harris.
Una luz al final del tunel
La ponencia de Harris en TED propone también 3 formas de contrarrestar el control de las mentes de los usuarios y redireccionar el progreso de las comunicaciones humanas mediadas por la tecnología.
Lo primero que se debe hacer según el experto es reconocer que el cerebro puede ser programado con bloques de tiempo configurados por terceros. Luego habría que implementar mejores prácticas por parte de los centros de control de contenidos (y pensamientos de acuerdo a la presentación del activista por la libertad digital). Por último se hace necesario un “renacimiento del diseño” capaz de organizar el tiempo de los usuarios de una forma más amigable y provechosas con sus expectativas de vida.
Al final, como dice Harris “eso implicaría dos cosas: Una nos estaría protegiendo de las líneas de tiempo, que no queremos experimentar, los pensamientos que no queremos procesar, para no tener ese timbre, que cuando suena nos dispersa. Y la segunda nos permitiría vivir la línea de tiempo que queremos”.
Ver Tristan Harris en TED: ¿Cómo un grupo de compañías tecnológicas controlan billones de mentes cada día?
Clic aquí para acceder a la presentación detallada de Tristan Harris en TED.